El Mondúver es un macizo montañoso situado en la comarca de la Safor, a 841 metros de altura. La cumbre pertenece al término de Xeresa, a pesar de que los términos municipales de Barx y Xeraco ocupan gran parte de la montaña.

Entre la Valldigna y la huerta de Gandia y cerrando la marjal de Xeraco-Xeresa, se levanta este macizo litoral cuya altura y silueta destaca sobre el golfo de Valencia. 

Si bien su cumbre pertenece al término municipal de Xeresa, buena parte de la montaña corresponde a los de Barx, Xeresa y Xeraco. Desde arriba, se extienden las magníficas playas mediterráneas de Xeraco y Gandia, y es posible disfrutar de unas vistas magníficas de todo el golf de València, que incluyen el cabo de Sant Antoni, la ciudad de València y, si el día presenta una buena visibilidad, la isla de Ibiza.

Tambien hay otras cimas subordinadas al Mondúver como El Toro (607 m), el Picaio (728 m) o la Falconera 495 m. 

El macizo reúne grandes calidades paisajísticas. En realidad, el macizo funciona como un acuífero complejo que alcanza su máxima actividad con ocasión de precipitaciones extremas. 

La posibilidad de controlar desde estas montañas las tierras llanas de la Safor y de la Valldigna y la disponibilidad de recursos naturales, especialmente de agua gracias a los numerosos manantiales existentes, explican la antigua ocupación del Mondúver. 

Diversos son los vestigios de asentamientos y poblados, destacando en la vertiente sur el yacimiento de la Cova del Parpalló, donde se han hallado importantes restos paleolíticos y, en la vertiente norte, la Cova de Bolomor.

La vegetación predominante en el macizo es un matorral, bosques de carrascas y alcornoques, la coscoja, el lentisco, el palmito o el brezo y numerosas aromáticas como el romero, el tomillo y la lavanda, acompañadas de pino carrasco y de pino rodeno. 

No obstante, algunos barrancos de la umbría han actuado como reductos de especies como el fresno, la sabina negral, el cade, el durillo, el aladierno y trepadoras como la madreselva y la zarzaparrilla. 

El clima presenta valores pluviométricos por encima de los 750 mm anuales, como consecuencia del efecto barrera que ejercen las montañas sobre las masas de aire húmedo del NE. 

La posibilidad de controlar desde estas montañas las tierras llanas de la Safor y de la Valldigna y la disponibilidad de recursos naturales, especialmente de agua gracias a los numerosos manantiales existentes, explican la antigua ocupación del Mondúver. Diversos son los vestigios de asentamientos y poblados, destacando en la vertiente sur el yacimiento de la Cova del Parpalló y la vertiente norte la Cova de Bolomor. La abundancia de fuentes y la gran altura del Mondúver que hace a la costa mediterránea facilitaba la defensa de los antiguos pobladores.