Passeig Frontón

El barranco de Xeresa, conocido también como el barranco de la Martina o de Calafat, se ha convertido en la calle principal, en el centro neurálgico del municipio. El pueblo ha ido creciendo a su alrededor y con el paso del tiempo ha sufrido una transformación significativa: ha pasado de ser un barranco a una zona cubierta y de paseo que hoy es el Paseo Frontón.

A su paso se articula la vida social del pueblo: la Casa de la Cultura, el Jardín de los Olivos, el Parque Infantil, el lugar de encuentro de los vecinos, el centro de celebraciones festivas, el mercado semanal e incluso el  Ayuntamiento.

También es conocido por la gente del pueblo por otros nombres: de Calafat, de Martina o simplemente el Barranco; todos se han usado en determinadas épocas. Ha sufrido varias transformaciones a lo largo de 60 años. Las más importantes fueron en 1953 cuando la Dirección General de Obras Hidráulicas autoriza el estudio y redacción de un proyecto para su adecuación frente a posibles avenidas de aguas, y en 1987 cuando se realizó el cubrimiento del mismo, convirtiéndose en lo que es hoy: el Paseo Frontón (en conmemoración a la ciudad francesa de Frontón, con la que está hermanada la localidad).